La semana pasada una avalancha en las montañas rocosas de Canadá se cobró la vida de tres alpinistas: la de los austríacos David Lama y Hansjörg Auer y la del estadounidense Jess Roskelly. Sus cuerpos fueron hallados el pasado domingo.

Sebas Álvaro, aventurero y colaborador de la Fundación, ha estado con José Ramón De la Morena en El Transistor para hablar de este suceso. «He estado realmente jodido y triste sobre todo por David, era el tipo al que más conocía», cuenta Sebas. «Era un chaval joven, de 28 años». Sus otros dos compañeros también eran jóvenes, no más de 36 años.

Una avalancha soprendió a los tres alpinistas mientras subían Howse Peak, una montaña que, a pesar de tener una altura de 3.365 metros –parecido al Monte Perdido– es una de las más complicadas de subir en las montañas rocosas de Canadá.

Junto con los cuerpos se encontró un móvil con fotos de los tres alpinistas en la cumbre del Howse Peak. Se les veía muy felices. Han muerto haciendo lo que más les gustaba. Además, Jess Roskelly compartía afición por el alpinismo con su padre John, uno de los alpinistas más importantes.

Sebas Álvaro colabora también con Marca. Cada semana publica una columna y la primera que hizo en este 2019 era sobre David Lama, a quien consideraba uno de los alpinistas más grandes.

Podéis leer aquí la columna de Marca y escuchar toda la historia de Sebas Álvaro en El Transistor a continuación.